Los resultados pueden variar según el tipo de tratamiento y las características de la piel del paciente, pero en general, se pueden esperar:
- Reducción de Arrugas: Los tratamientos como la toxina botulínica (Botox) y el ácido hialurónico suavizan las arrugas y líneas finas en el cuello, escote y manos, proporcionando una piel más lisa y juvenil.
- Mejora de la Firmeza y Elasticidad: Procedimientos como hilos tensores, radiofrecuencia (RF) y PRP estimulan la producción de colágeno y elastina, lo que resulta en una piel más firme y con mayor elasticidad en el cuello y escote.
- Restauración de Volumen: El ácido hialurónico en manos y escote ayuda a restaurar el volumen perdido, dándole una apariencia más joven y menos envejecida.
- Mejor Tono de Piel: Tratamientos como el peeling químico, el láser fraccionado CO2 y la mesoterapia mejoran la textura y el tono de la piel, reduciendo manchas solares y otras imperfecciones, dejando la piel más luminosa y uniforme.
- Reducción de Flacidez: Los hilos tensores y la radiofrecuencia son especialmente efectivos para tensar la piel flácida en el cuello y escote, devolviendo una apariencia más firme y tonificada.
Cuidados Posteriores
Después de someterse a tratamientos de rejuvenecimiento en manos, cuello y escote, es esencial seguir algunos cuidados para garantizar los mejores resultados y evitar posibles complicaciones. Los cuidados pueden variar dependiendo del tipo de procedimiento, pero algunos cuidados generales incluyen:
Protección Solar, evitar calor intenso, no masajear las zonas tratadas, evitar el uso del maquillaje, evitar actividades que puedan irritar la piel